Trol
Un grupo de estudiantes universitarios filman un documental sobre la caza ilegal de osos en Noruega. En su camino se topan con un enigmático personaje que es acusado de ser un cazador ilegal. Descubren que en realidad es un Cazador de Trolls.
Cámara en mano, el trio de estudiantes se encontrarán documentando cada movimiento de éste héroe nada común: El cazador de Trolls, y arriesgan sus vidas para descubrir los secretos de las creaturas que pensaron que sólo existían en los cuentos de hadas.
Crítica
Esta película podría ser una más del género de falso documental, todo el tiempo vemos como ese trio de muchachos universitarios van grabando, y vemos todo lo que les pasa detrás de cámaras. Lo innovador que presenta el director André Ovredal, con su opera prima, es el tratamiento de un tema que ha sido muy poco explorado en la cinematocrafía: Los Trols, e intenta darles una explicación, reconstruir y darle más fuerza a estos seres de la mitología escandinava.
Algo que luce espectacular son los efectos especiales, ya que al tratarse de una cinta que intenta ser un falso documental, debe de parecer tan real, de no locrarlo se perdería la intención del filme, y gracias a esos Trolls se logra esa fantasía en el espectador. Los sonidos también están muy bien trabajados.
Trolh Hunter, nombre en inglés, logra generar momentos de tensión, y algunas situaciones de suspenso, pero en general el desarrollo argumental, que ésta bien sostenido, es, en ocasiones, bastante lento. Por cierto, Chris Columbus, guinista de gremlins, prepara el remake americano.
En general es una película entretenida, de lo mejor que se exhibirá por estas fechas. Se estrena en nuestro país éste viernes 11 de noviembre.